Ser un líder aunque no se ostente ningún cargo de liderazgo.

 

En 1808, España se queda sin su rey Fernando VII a manos de Napoleón, quien entrega el trono a su hermano José Bonaparte.

 

Abandonado por sus reyes incapaces, el pueblo español reaccionó heroicamente para desalojar al invasor.

 

Fue este admirable pueblo quien sin reyes asumió tarea patriótica de defender su tierra. No necesitó de un líder en concreto para que los guiara, sino que aparecieron diversos líderes en todos los niveles de la sociedad española de la época.

 

Hey Warrior… Para ser un líder no se necesita ser un rey.

 

Lo que nos enseñan las fuerzas especiales respecto del liderazgo.

En la fuerzas especiales, siempre se está poniendo énfasis en el liderazgo. Esto es esencial en el trabajo que realizan.

 

Todos deben estar en condiciones de asumir el mando cuando sea necesario. La misión debe cumplirse a toda costa.

 

Independiente del cargo que cada uno tenga dentro del equipo. Desde el de más alto rango hasta el último deben estar preparados para asumir el mando en cualquier momento del desarrollo de la misión.

 

No se puede depender siempre del comandante del equipo. Ya que si este se ve impedido de seguir cumpliendo con sus funciones, la misión debe cumplirse.

 

Por lo tanto, otro deberá hacerse cargo.

 

Preparación constante para ser líderes.

Prepararse para asumir el liderazgo, no es excluyente para las fuerzas especiales. Para los demás también es importante.

 

Y no es necesario ser el CEO de una gran empresa para ser un líder. Ni siquiera es necesario tener un puesto de rango medio en cualquier empresa.

El liderazgo se debe cultivar siempre por lo guerreros, independiente de su cargo actual.

 

Llegará un momento en que debamos de hacer uso de nuestras habilidades para dirigir o comandar equipos.

 

Incluso en nuestra vida cotidiana se presentará la oportunidad de ser verdaderos líderes. Como cuando debemos motivar a nuestros hijos a superarse a sí mismos.

 

Ser un líder para tener un puesto de líder.

Cuando nos preparamos para ser líderes y para ser mejores líderes, habrá momentos en que deberemos hacer uso de nuestras habilidades dirigiendo a otras personas para un fin determinado.

 

Estas oportunidades nos ayudan a llegar a puestos de liderazgo.

 

Por lo que, vale la pena cultivarnos como líderes. Quienes nos rodean se darán cuenta de nuestras habilidades, sabrán en quien confiar cuando las circunstancias de la vida requieran de verdaderos hombres que lideren.

 

Cómo desarrollar el liderazgo.

Lo primero es…

 

Liderándose uno mismo.

Y ¿cómo liderarse a uno mismo? Desarrollando autocontrol, disciplina y coraje.

 

Venciendo a nuestros miedos. Enfrentándose a estos.

 

Es un camino duro, pero por el cual, todo líder guerrero debe atravesar. Sin duda que vale la pena. El crecimiento que se experimenta nos ayuda a lograr cosas que antes no creíamos capaces.

 

Siendo un ejemplo.

Dicen que más se enseña siendo un ejemplo, que explicando las cosas.

 

También dicen “sé el cambio que quieres ver”.

 

Cuando damos el ejemplo, hacemos algo que nos separa del resto. Incluso nos separa de otros líderes. Inspiramos a otros.

Hubo una vez un combate épico entre un buque de guerra acorazado y una fragata de madera que apenas podía moverse.

 

También, hubo en ese combate un capitán, que alentó a sus marinos a nunca rendirse, luchó hasta el final, entregando su propia vida por la dignidad de su bandera y todo lo que esta simboliza.

 

Y sus bravos marinos siguieron su ejemplo.

 

Forja hábitos de liderazgo.

Aprender todos los días. Todo líder siempre tiene que estar aprendiendo, tiene que dominar su campo.

 

Un líder guerrero cultiva su cuerpo. Levanta pesas, está en forma.

 

Se comunica de manera eficaz en público. Inspira, motiva y ordena de tal manera que impulsa a la acción a quienes están bajo su mando.

 

Forjarse como líder.

Forjarse como líder, es algo que todo miembro de esta comunidad debería hacer, independiente de la posición en la que esté actualmente. No es fácil, pero las recompensas son amplias. 

 

Como te decía habrá momentos en que se requiera de tu liderazgo y debes estar preparado para ello.

 

La sociedad reclama buenos líderes. Se uno de ellos.

 

¿Quieres iniciar tu propio negocio? Debes de cultivarte como líder. Vas a interactuar con otras personas y deberás ser un líder para todos ellos.

 

¿Quieres transmitir tu mensaje? Serás un líder y más vale que te prepares.

 

Nuestras familias lo reclaman, nuestro país lo reclama, nuestros negocios lo reclaman, hey Warrior… Tu lo reclamas.

 

Hasta la próxima ocasión,

Damián Cáceres.