¿Quieres paz? Prepárate para la guerra.

 

En la sociedad actual las personas están más suavizadas. Esto lo dijo David Goggins, ex navy seal y ultramaratonista. Se intenta reprimir la violencia natural de los niños, lo que en realidad termina por ser totalmente contraproducente.

 

¿Te haz dado cuenta que los valores masculinos se están dejando de lado? Ser sensible, débil, afeminado y llorón es lo que se estila ahora.

 

Que me dices de aprender a dar un buen puñetazo… ¡O noooo! que escándalo.

 

Hoy en día los juegos algo más violentos, tienden a ser evitados o cortados por los sistemas educativos. Pero estas medidas terminan por ser contraproducentes, ya que, hay una violencia natural en los niños y no se permite liberar toda esa energía.

 

Además, se pierden oportunidades para que los niños aprendan a defenderse y arreglar sus problemas.

 

“Pero queremos personas que sean pacíficas y no que resuelvan sus problemas a golpes”

 

Si exacto yo también quiero eso y supongo que tú también.

 

Bien, si quieres paz, si quieres que los matones de la escuela o del barrio o si quieres que tus compañeros de trabajo o universidad no te transgredan, saber pelear es lo primero por lo que deberías empezar.

Aprende a pelear para defenderte.

 

Aprender a pelear no significa aprender a crear violencia a otros solo porque, sí.

 

Cuando alguien sabe defenderse y es capaz de aplicar violencia frente a quien lo ataca, pocos querrán aventurarse a pelear o molestarle siquiera.

 

Los matones de la escuela (o de donde sea) dejarán de molestarte si sabes darle un buen puñetazo que le haga explotar su nariz en sangre.

 

Sabrán con quien no hay que meterse, te aprenderán a respetar, incluso te temerán un poco. No te preocupes por eso, déjalos. Tan solo tu eres una persona pacífica que está preparada para la guerra.

 

¿Cómo aprender a pelear para defenderme?

Aprender artes marciales o sistemas de defensa personal, como el Krav Maga.

 

Cualquier arte marcial te va a servir, elige la que mejor se adapte a tí. También el boxeo o las mma te ayudarán de muy buena manera.

 

Lo importante es que seas constante y disciplinado en tu practica. Además, ocúpate de  escoger una buena escuela que sea exigente y que te enseñe valores para la vida como el honor, la lealtad y el amor a tu país y familia.

Aprender a pelear te lleva a canalizar la ira.

¿Quieres ser alguien pacífico ¿no?

 

Al practicar algún tipo de arte marcial, como las artes marciales mixtas, se libera toda esa energía acumulada.

 

Al final de cada entrenamiento te sientes mejor. Ya golpeaste hasta el cansancio el puto saco de box. 

 

Te enfrentaste a tu contrincante de manera reglada y controlada. Ya te siente libre de esa ira que antes te quería dominar.

 

Hey pero fuiste proactivo y la lograste dominar y liberar.

 

La practica de algún arte marcial, conlleva un duro entrenamiento físico, lo cual, estimula las capacidades cognitivas y además, libera ciertas endorfinas que nos hacen sentir mejor. 

 

Y te hace…

 

Estar en forma física.

Desarrollas fuerza, potencia, velocidad, flexibilidad y resistencia muscular y cardiovascular. Puedes hacer frente a los retos del día a día como subir esas escaleras sin mayor dificultad.




Se obtiene mayor coordinación y mejores reflejos.

La coordinación producto de la practica de artes marciales es realmente significativa. Tu cuerpo comienza a actuar en sinergia. Necesario para dar dos o tres puñetazo consecutivos.

¿Qué me dices de agregarle patadas al asunto?

 

Hey pero también, aprender a esquivar o bloquear golpes del contrario. Para esto se necesita desarrollar los reflejos. Esto nos puede ayudar en momentos críticos en nuestra vida, como puede ser frenar justo a tiempo cuando alguien o algo se cruza en nuestro camino por la calles de la ciudad.

 

Se obtiene disciplina.

“La disciplina nos hará libres” nos dice Jocko Willink. Y es cierto.

 

 

Al ser disciplinados podemos vivir de acuerdo a lo queremos de la vida.

 

¿Quieres un cuerpo de espartano? Con bastante disciplina lo vas a lograr.

 

¿Quieres ser el mejor en tu carrera o en tu sector en los negocios? Warrior se necesita una buena dosis de disciplina.

 

La disciplina es un rasgo masculino que cada ganador lleva consigo a donde va. Y la practica de artes marciales, nos ayuda a construir disciplina.

 

Recuerdo una vez cuando practicaba Tae Kwon Do, me inscribieron para participar en la modalidad Poomsae de un campeonato.

 

Practicaba 3 veces por semana durante más de un mes. Fuí disciplinado entrenando las formas, en realidad ni siquiera me preocupé si ganaría o no durante el tiempo en que me preparé. Solo entraba al dojan y me ponía a practicar una y otra vez. Esto lo hacía cada vez que tenía entrenamiento.

 

En realidad no creía que pudiera ganar, ya que los participantes eran de todas las edades y grados.

 

Había varios cinturones negro, y personas sobre los treinta años. Mi grado era solamente amarillo verde y tenía 11 años.

 

Así fue que participé y las horas de practica dieron resultado. Les termine ganando a todos, lo que me dejo sorprendido. Pero… Ese es el poder de la disciplina.

 

En el dojan hay ciertas formas de tratar con los compañeros, jerarquías y se fomenta el respeto hacia los demás y el compañerismo.

 

Se nos enseña a esforzarse por sacar una técnica en particular. A proponerte objetivos y entrenar duro para lograrlos.

 

Esto se transfiere a los demás aspectos de la vida. Y ocurre que los demás lo notan y te empiezan a respetar. 

 

Aprender a pelea te enseña valores.

Te decía que en el dojan existen ciertas formas. Una de estas es que cada vez que uno ingresa, se solicita permiso al sabonim o a quien tiene el más alto grado en este. Además, de esto se saluda primero a la bandera.

 

Se nos enseña el respeto hacia los demás, que es algo fundamental si queremos ser personas pacíficas. También se nos enseña el amor a la patria, a la familia, el honor, la lealtad, el trabajo en equipo, la humildad y a esforzarse por lograr lo que uno quiere en la vida.

 

Se obtiene fortaleza mental.

Ser fuerte mentalmente implica mantener el autocontrol en las situaciones que parecen desesperadas como encontrarse son los matones de turno.

 

También implica seguir avanzando aunque la vida te golpee duro. Te puedes caer si el golpe es demasiado duro, pero si eres fuerte, te vas a volver a levantar y seguir.

 

No solo te da resistencia física, sino también resistencia mental.

 

En un entrenamiento de Tae Kwon Do mi sabonim me preguntó si había practicado en mi casa una patada la tuit chagui. Le mentí, le dije que sí, pero me descubrió.

 

¿Te dije que también, uno de los valores que enseñan las artes marciales es honestidad?

 

El castigo fue hacer 100 de estas patadas seguidas.

 

Para mí hacer todas estas patadas consecutivas fue duro, y se me hizo eterno. Pero lo logré. Esta situación quedó en mí y lo que aprendí espero me acompañe el resto de mi vida.

 

Aparte de aprender el valor de la honestidad, desarrolle una mayor resistencia mental, seguir adelante a pesar del cansancio, a pesar de las emociones a pesar de los obstáculos que vayan surgiendo.

 

Y esto se aplica a otros ámbitos de la vida.

 

Me dio también más…

 

Autoconfianza.

Cuando sabes dar bien una patada el cabeza, cuando has llevado tu cuerpo a nuevos límites, en el momento en que lo que parecía difícil ahora es algo automático es donde se obtiene autoconfianza.

 

Esto no va a llegar de un día para otro. Lleva más tiempo, pero eventualmente tu nivel de autoconfianza mejora de manera muy notoria.

 

Pero ¿sabes que pasa también?

 

Adquieres humildad.

Sabes que hay otros que también tienen disciplina, que también entrenan y tienes que prepararte más y más porque de lo contrario te van a superar.

 

Entonces llegas a cada entrenamiento con el afán de esforzarte lo más posible.

 

Te vuelve competitivo.

Para ser una persona pacífica, se requiere canalizar la ira. No hay porqué reprimirla, eso solo nos perjudica. 

 

Pero cuando canalizamos nuestras emociones hacia cosas productivas, toda esa energía se va  cosas que nos hacen mejorar en nuestra vida.

 

Y lo cierto es que la practica de artes marciales tradicionales, como cualquier otra, despierta en nosotros ese espíritu competitivo.

 

Esas ganas de ganar, evidentemente en unos más que en otros.Y competir es divertido.

 

Aprender a pelear es divertido.

Te vas a divertir aprendiendo cualquier estilo de artes marciales o sistema de defensa personal.

 

Estamos hechos, para ser fuertes, para cazar, para luchar por nuestra propia supervivencia. Así ha sido durante cientos de miles de años.

 

Después de un duro entrenamiento, te vas a sentir mejor casi siempre.

 

Círculo de leones.

Practicar mma, Tae Kwon Do, Jiu jitsu, Kickboxing o cualquier otro, significa que vamos a  relacionarnos con personas con valores similares, podemos encontrar los mejores amigos, podemos crear un círculo de leones fuertes y líderes que nos van a potenciar en nuestra vida.

 

Más testosterona.

Subirte al ring y dar algunos golpes y recibir también otros tantos, hará que despierte en nosotros ese espíritu guerrero y con ello nuestros niveles de testosterona.

 

¿Quieres inspirar respeto en los demás? Mantén tus niveles de esta preciada hormona altos.

 

Todo guerrero debe saber como dar un golpe.

Es parte de todo guerrero saber luchar. Estamos hechos para defender a los nuestros, a nuestro país y a uno mismo. Saber dar un puto golpe es obligatorio en cada guerrero.

 

¿Quieres que no se metan contigo?

 

Entonces déjales claro que no deben meterse contigo, aprende a pelear, las mma, el Jiu Jitsu, el boxeo, el Taekwondo (no son las únicas, por supuesto) te van a servir para ser un Warrior que no permite mierda…

 

La practica de cualquier arte marcial o sistema de defensa personal, nos ayuda a canalizar esa violencia que en otros momentos (como en la escuela) nos obligan o nos vemos obligados reprimir. Y será en un ambiente controlado.

 

La paz solo se conserva si estamos preparados y dispuestos a pelear con todo lo que tenemos para preservarla.

 

Será hasta una próxima vez,

Damián Cáceres.