“No necesito a un hombre para criar a mis hijos” … “Los hombres no sirven para nada” … “Puedo concebir mediante inseminación artificial” … “Puedo sola con todo, soy una mujer independiente” … La mujer moderna repite esto a cada rato. Las más radicales se lo toman más enserio, pero el resto solo lo repite y repite. Pero en el fondo saben que es una estúpida mentira.

Al fin y al cabo, sabemos cómo influye la figura paterna en los hijos. Lo sabemos, pero debido al constate bombardeo de ideologías totalmente aberrantes y desconectadas de la realidad, nos empezamos a cuestionar si realmente como hombres influimos en las vidas de nuestros niños.

Lo evidente se vuelve difuso… Cosas de estos tiempos…

Entonces ¿Qué representa el padre en la vida de un niño? ¿Qué importancia tiene un padre en la vida de un hijo? ¿Cuál es el propósito de una figura paterna? ¿Cómo influye el padre en la vida de su hijo?

Estas, son preguntas que se repiten hombres y mujeres, en un intento de poder dilucidar el asunto. Porque, por un lado, se nos está diciendo que los hombres son innecesarios (y no solo las más radicales lo dicen) y por otro, tenemos a nuestra razón, lógica, experiencia propia y fe, que nos dicen que los hombres sí que importamos, de hecho, somos fundamentales en el funcionamiento de la sociedad.

En este artículo te mostraré, por qué, es tan importante la presencia del padre en el desarrollo de los hijos, que la paternidad no es algo reemplazable. Por mucho, que los medios progres nos quieran hacer creer lo contrario.

Tenemos una responsabilidad grande. Y no debemos dejarla a un lado. De esto, depende en buena medida, la recuperación de esta sociedad que va rumbo al precipicio.

Dios nos la ha dado, forma parte de nuestro deber como hombres. Sé, que está de moda el hecho de no querer tener hijos, incluso muchos hombres, toman la decisión de abandonar a sus hijos.

He escuchado esto de no querer tener hijos a supuestos hombres tradicionales. Bueno, si lo comparamos con los progres actuales, claro que sí que parecerían tradicionales. Pero, no son más que liberales, quizás conservadores, quizás más moderados… modernos, al fin y al cabo.

En fin, ser padre no es algo fácil, evidente que no. Pero, sin embargo, es algo bello, y que te hace crecer y sobre todo cumplir con nuestro deber para con nuestra patria, como para con Dios.

Cultura de irresponsabilidad.

Es que vivimos en un mundo infantilizado, donde se nos está incentivando a rehuir de lo que nos toca hacer. Y eso es algo poco masculino. Centrarse en el hedonismo, en el placer propio, temporal y efímero, es lo que nos han estado inculcando desde todos los medios, desde la educación formal, hasta en los medios masivos de comunicación y redes sociales.

Con la revolución sexual de los años 60s del siglo pasado, en el momento en que se inventaron y masificaron los anticonceptivos, vemos cómo se invierte lo que se entiende por sexo responsable.

Se nos dice ahora que debemos tener sexo con cualquiera, pero que debemos “cuidarnos”, que tenemos que ser “responsables”.

Y ¿Cómo es que somos “responsables”? tomando la píldora, usando el preservativo y toda la gama de dispositivos que han inventado para evitar el embarazo.

Pero toda esta mentira queda al descubierto, cuando vemos que la sociedad se ha vuelto sumamente irresponsable.

Mas bien es, ten sexo irresponsable estando con todas las chicas que quieras (o que puedas) y vive una vida infantil rehuyendo de lo que te toca como hombre. Sin las consecuencias (más bien, sin consecuencias aparentes).

La importancia de la figura paterna: estar agradecidos de nuestros padres.

¿Quieres saber cómo te influye tu papá? En mi experiencia, nuestros padres van a influir de manera muy significativa en nosotros.

He de decir que la relación con mi padre no fue siempre del todo fácil. Sin embargo, he de decir también, que le estoy profundamente agradecido por haber forjado en mí un carácter y ética que conservo hasta hoy y espero desarrollar y llevar hasta el fin de mis días en este mundo.

Mi padre me enseño que se debe tener coraje en la vida. Que tenemos que ser unos guerreros.

Me inculcó el patriotismo, el amor por mi amado país.

El deporte, es algo que desde pequeño incentivo en mí. Realizando sacrificios para que su hijo pudiera desarrollarse en un deporte determinado. Eso, yo no lo veía cuando era un niño, sin embargo, ahora le agradezco enormemente.

Mi padre tenía una pequeña biblioteca, había una cantidad no despreciable de libros en la casa. No recuerdo que él me haya estado incentivando a la lectura (lo más probable es que sí), pero el solo hecho de tener esos libros ahí en la sala de la casa, cuando llegó el momento, me podía pasar horas leyendo algunos, sobre todo los de historia, políticas y humanidades en general.

Mi padre con su ejemplo, me enseño lo que es el liderazgo, lo que es ser masculino y propender a ello. Me enseño que el honor vale, y vale más que cualquier riqueza de este mundo. Me enseñó también, a no claudicar en mis valores más fundamentales, en mis principios. Esto último, lo tengo fuertemente internalizado en mi mente y mi corazón como algo que viene de mi padre.

Con el ejemplo, se enseñan muchas cosas, una de las más destacables de mi papá, fue su entereza y dignidad ante los embates de la vida. Sin duda, es un hombre fuerte mentalmente.

Una vez lo escuché diciendo algo así como que, aunque todo esté jodido él seguiría levantándose, bien vestido, con los zapatos bien lustrados y con la mirada en frente. Acaso ¿así es como debemos ser los hombres?

Esto no solo lo decía, sino también lo aplicó y lo sigue haciendo.

Cuando entraba a mi adolescencia y buena parte de ella, la situación económica de mi familia no era la mejor. Diría que no nos faltaba nada casi. Pero tampoco es que sobrara el dinero. Vinieron los problemas familiares y al cabo de un tiempo, mis padres se separaron, lamentablemente.

Pero mi padre se mantuvo firme. Ahora, mirando en retrospectiva, debe haber sido algo difícil para él (sin duda que para mi mamá también) y, aun así, se mantuvo fuerte. Solo en su cuarto debe de haber flaqueado o llorado. Pero delante de nosotros no lo hizo, no tengo recuerdos de mi padre demostrando debilidad delante de mí o mis hermanas.

Eso es algo que quedó en mí, esa fortaleza la cual, debemos de tener todos los hombres. Estamos llamados a tenerla y desarrollarla.

Debemos ser los pilares, no unas niñas que lloran por todo y se desploman cuando las cosas se ponen difíciles.

Con esto no digo que seamos orgullosos en el sentido de creerse totalmente autosuficiente. No, nada de eso, porque, debemos reconocer que nada logramos sino es por Dios. Que lo necesitamos y que no somos nada sin Él. Y que por eso recurrimos a Él.

Si no, me refiero a ser digno. A ser esa roca, ese pilar el cual los hombres estamos llamados a ser.

A mi padre le agradezco también, esos momentos en mi niñez en donde le hacía preguntas y el me respondía, para mí era el hombre que más sabía en el mundo. Me parecía un hombre muy inteligente, y desde luego, lo era y lo sigue siendo.

Recuerdo esas conversaciones interesantes sobre historia, o cuando lo escuchaba conversar con otras personas sobre los más variados temas. Yo lo disfrutaba mucho.

Mi padre siempre ha sido alguien entregado a su comunidad, aún a costa de su propio bienestar económico y el de su familia. Pero sigue su vocación de servicio público. Eso es algo que puedo admirar en él. Esa entrega a los demás, por el bien de su comunidad y de quienes le rodean.

En fin, a mi padre tengo mucho que agradecer, y seguramente tú también al tuyo. Es que la sociedad entera tiene mucho que agradecer a esos padres que, aunque con equivocaciones han ido forjando a sus hijos mostrándoles el camino sobre como ser mejores.

La sociedad no puede prescindir de los hombres. Hoy más que nunca se necesitan hombres masculinos, patriarcales capaces de liderar y recuperar nuestra civilización que va rumbo a la autodestrucción.

¿Por qué es importante la figura paterna para un hijo?

Para responder a esta pregunta te dejo con algunas afirmaciones respaldadas por diversos estudios… y por la razón y experiencia también.

En los hogares donde solo está la madre, la tasa de pobreza es mayor, por lo menos, en los Estados Unidos, y supongo que se da con mayor razón en el resto de los países de Hispanoamérica.

Es el hombre que, por lo general, es el proveedor del hogar. Entonces, cuando este ya no está, ocurre que la situación financiera de los hijos y la madre se ve comprometida. Muchas veces, el padre ya no puede ayudar como lo hacía antes, porque, ahora tiene que costear otros gastos y lo que dispone para sus hijos es menor.

Otras veces, derechamente el padre simplemente no ayuda económicamente, por la razón que sea, pero los hijos se ven afectados por esto.

Cuando el padre está presente, es menos probable que los hijos caigan en adicciones de drogas. Se que también en hogares donde hay padre y madre presente se da esto. Pero en cantidad menor a que cuando solo está la madre.

Tengamos en cuenta que es el padre el que mayormente impone la disciplina y enseña el autocontrol a los hijos.

Las probabilidades de ir a la cárcel provienen mayormente de hijos sin el padre o figura paterna presente. en esta encuesta realizada por el departamento de justicia puedes ver que el 56% de los reclusos habían crecido en hogares monoparentales o con un tutor.

Los hijos con padre presente obtienen por lo general, mejores calificaciones que los que no. (Estudio).

Sobre todo, cuando el niño pasa tiempo con su padre, es que aprende un montón de cosas. Recuerdo que cuando pasaba tiempo con mi padre o solo escuchaba sus conversaciones que mantenía con otras personas, aprendía sobre variados temas, fundamentalmente de política e historia. Entonces, esto repetido por varios años, formó en mí un vocabulario más amplio que la media de chicos de mi edad. (Aunque no considero que tenga un vocabulario tan amplio, pero si, sobre el promedio… Y lamentablemente el promedio no es tan alto).

Otra vez en esto juega un papel importante el hecho que es el padre quien forja el carácter del niño. Además, que impone la disciplina, enseña con el ejemplo a tener mayor autocontrol.

Los niños sin padre tienen más probabilidades de ser sexualmente activos durante la adolescencia. 7 veces más probabilidades de embarazo a temprana edad y más del doble de probabilidades de tener sexo a temprana edad. En comparación con los que tiene a su padre presente. (Estudio).

Esto supone un problema para la sociedad en su conjunto, debido a que, una vida sexual desordenada es causante de un montón de problemas sociales. Como, por ejemplo, familias desestructuradas, una sociedad moralmente débil, mayores tasas de enfermedades psicosociales, etc. Además, que contribuye en buena medida a seguir en el ciclo de hijos sin padre presente y todos los problemas que aquello acarrea.

Los niños sin padre tienen más probabilidades de ser obesos. De hecho, un padre en forma es un buen predictor de si los hijos estarán en forma. (Estudio).

Son los padres quienes alientan a los niños a desarrollar un pensamiento más independiente, crítico, a buscar soluciones a los problemas, a tomar riesgos saludables y a ganar más confianza.

Esos momentos a solas con tu padre son memorables, quedan para toda la vida, aprendes un montón. Por ejemplo, cuando lo ayudas a fabricar algún mueble, o tuviste alguna salida con él, ya sea de excursión, donde aprendiste aspectos de supervivencia, o con el solo hecho de pasar tiempo con él.

Recuerdo que, de niño y adolescente, mi papá a menudo me llevaba con él a sus actividades. Por sus labores, siempre estaba con personalidades de relativa importancia de la zona donde crecí y también de mi país. Como políticos, empresarios, altos mandos de las fuerzas armadas, etc.

Pero también, pasaba mucho tiempo con personas de las más diversas situaciones sociocultural-económica.

Al estar siempre yo ahí, aprendí variedad de cosas. Que luego me sirvieron, por ejemplo, cuando entre a estudiar la carrera de derecho, podía entender casi todo, la jerga jurídica me era familiar, mientras que a otros no lo era y se les dificultaba la comprensión de las materias.

No obstante, lo más valioso que aprendí, fue a tratar con todo tipo de personas, sin importar su estatus social, su dinero, ni de donde venían. De todos, se puede aprender algo. Y con todos puedo tratar.

Niños más hábiles socialmente, con mayor sentido del honor y moralidad.

Esto es más probable cuando está el padre presente. Uno de los motivos es que se realizan juegos bruscos. Rara vez esto se dará con la madre, debido a que somos diferentes y complementarios. Porque ¿sabes que somos diferentes y complementarios, cierto? Es que en el mundo de hoy estas cosas evidentes, ya no lo son tanto…

La toma de riesgos por parte del niño tiene que ver con este tipo de juegos, así también su autoconfianza y desarrollo de un mayor vínculo afectivo con su padre.

Conclusión.

Cómo ves, el por qué, es importante que un padre esté en la vida de su hijo, no es un capricho, ni tampoco es ser un machista. No tenemos por qué seguir los lineamientos de gente que quiere la destrucción de todo lo que es bueno. De ideologías degeneradas como el feminismo.

Por mucho, que la mujer se piense independiente y empoderada, lo cierto, es que el hombre juega un papel fundamental en la vida de sus hijos y en la sociedad toda.

Aquellas son cosas evidentes, pero hoy en día tenemos que explicarlas y demostrarlas, debido al constante adoctrinamiento que se hace a las nuevas generaciones y en realidad, a la sociedad toda.

G. K. Chesterton decía que iba a llegar el momento que se tendría de desenvainar la espada para decir que el pasto es verde.

Ese momento ya ha llegado. Y cada vez con mayor intensidad. La cultura de la cancelación hace que solo la “verdad oficial” sea la aceptable. Que la falsedad se haga la norma.

La importancia de la figura paterna no debería ser dejada de lado, no podemos desentendernos de nuestro papel como hombres, que por mucho que se nos inste a llevar vidas cómodas, sin responsabilidades, tenemos un deber… y en cada momento de la historia se nos exige alguna cosa que debemos entregar para ayudar a mejorar este mundo y, en definitiva, dar mayor Gloria a Dios.

Hoy nuestra sociedad está casi en ruinas, la decadencia se hace patente cada vez más y en todas partes. Entonces ¿qué vamos a hacer? ¿Quedarnos cómodos en nuestras casas, simplemente aceptando lo que agendas perversas quieran hacer con lo que más amamos?

La historia nos exige que luchemos, como siempre ha sido para los hombres. La lucha esta vez, está en retornar a nuestros valores tradicionales, a cultivar la virtud, a cumplir con nuestro deber como padres.

Solo así podemos empezar a recuperar nuestros países. Solo así podremos recuperar a nuestros hijos, para Dios.

Eso es todo por esta ocasión,

Damián Cáceres.